Es bien conocido que el Quindío es un importante punto de avistamiento de aves, tanto a nivel nacional como internacional*. Ahora bien, si no somos expertos ornitólogos, ni tan sólo aficionados, sino que valoramos la apreciación de la fauna y la flora local como una parte más de la experiencia de conocer un lugar… podemos acercarnos a un pequeño restaurante próximo al centro de Calarcá y compartir un almuerzo observando barranqueros, carpinteros, bichofué gritón, eufonia gorgiamarilla, diversos colibríes y otros pájaros que rara vez tendremos la oportunidad de apreciar si nos encontramos en un medio urbano.
La particularidad de este pequeño y acogedor lugar es que está contiguo a una quebrada. Un agradable jardín, una antigua ánfora de piedra con agua, árboles frondosos y platanales, se combinan para crear un ambiente que atrae a pájaros muy diversos y a las ardillas, que se acercan a comer mientras nosotros podemos observarlos desde el local, al tiempo que degustamos del almuerzo.
Vale la pena la experiencia de disfrutar de la belleza de la naturaleza, sobre todo si podemos incorporarla a nuestra cotidianeidad, compartiéndola en familia… otra de las oportunidades que nos brinda el Quindío.
*De las 1870 especies de aves con que cuenta Colombia (de las 9.000 que existen en el mundo) 534 se pueden observar en el Quindio.
